El mildiu, tratamientos preventivos

¿Qué es el Mildiu?

El mildiu, se puede clasificar como uno de los grandes enemigos de nuestra huerta. Es un hongo de la familia de los Peronosporaceae, con más de 600 especies dentro de ella.

Características el hongo Mildiu

Tiene un porcentaje de reproducción muy alto, por lo que tenemos que tener especial cuidado con él. Es capaz de permanecer durante todo el invierno latente para despertar con las primeras temperaturas cálidas de la primavera.

Si a parte de las temperaturas altas, le añadimos una mala ventilación en nuestro cultivo, la acumulación de restos vegetales en el suelo, demasiado follaje en las plantas y un porcentaje elevado de humedad en el ambiente, tenemos las condiciones ideales para que este hongo campe a sus anchas por nuestro cultivo.

¿Cómo se propaga la enfermedad del Mildiu?

Lo característico del mildiu es que puede pasar de una planta a otra con mucha facilidad. Tocando la planta contaminada para luego tocar una sana, un poco de viento o que las hojas se toquen será suficiente para contaminar las plantas sanas.

Lo más importante que tenemos que saber del mildiu es que debemos hacer especial hincapié en la prevención y si eso no fue suficiente y el hongo terminase instalándose, nada más veamos una pequeña señal de mildiu debemos retirar las partes afectadas y actuar con mucha rapidez con el tratamiento.

El mildiu se propaga por esporas y es altamente invasivo

¿Cómo prevenir el mildiu?

Os mostramos algunos consejos a la hora de enfrentarse con este hongo, recalcando y subrayando que lo más importante es la prevención con remedios naturales.

El hongo una vez instalado es muy difícil combatirlo y de forma casi segura vamos a tener que recurrir a productos químicos  para tratarlo.

Mantener una buena ventilación

En el cultivo es algo imprescindible. Debemos dejar respirar a nuestras plantas, las plantas hacinadas competirán por el oxígeno, además de que cualquier enfermedad que tengan, ya no sólo el mildiu, se transmitirá mucho más fácil de una a otra planta si están demasiado pegadas.

Controlar la humedad

Con demasiada humedad el mildiu campará a sus anchas.

Para ello debemos mantener una correcta aireación, no regar directamente el tallo o hojas  (ya sabéis que lo ideal es riego por goteo, esto evita un consumo excesivo de agua y hace que se riegue sólo la tierra sin mojar nuestras plantas) evitar que las plantas se toquen una con otra (esto además de favorecer que el aire pase correctamente por entre las plantas, evitará que, en caso de haber mildiu, se propague tan rápidamente).

En caso de tratarse de un cultivo de invernadero, podemos instalar un marcador de humedad, así sabremos siempre el grado de humedad que tenemos y en caso de que haya demasiada, podamos abrir las ventanas para ventilar.

Podas para evitar una masa foliar muy frondosa

Cada planta tiene unas necesidades diferentes, así que debemos informarnos de cómo hemos de realizar cada poda dependiendo de si se trata de una u otra. En el tomate, por ejemplo, es un paso muy importante y que ayudará mucho a que no se propague la enfermedad.

Aporte de nutrientes necesarios para cada planta

A veces plantamos sin preocuparnos por aportarle nada más a la planta una vez pasado un tiempo.

Hacer abonados frecuentes de lo que necesite cada cultivo ayudará a que las plantas se mantengan sanas y fuertes y esto es el paso principal para que tengan la fuerza suficiente para combatir una enfermedad.

Correcta asociación de cultivos

La agricultura moderna está recuperando antiguas tradiciones de la agricultura ancestral que con los cultivos industriales y masivos modernos se habían casi perdido. Y es que la naturaleza nos lo pone mucho más fácil de lo que nosotros queremos. A veces bastará con plantar con lógica asegurándonos de poner próximas plantas que se asocien bien y que se combatan entre sí mismas las enfermedades o plagas que les puedan atacar. Una asociación muy común y que funciona genial es la del tomate, cebolla, lechuga y albahaca.

La cola de caballo es un potente fungicida gracias a una propiedad que contiene, la Equisetonina

¿Qué tratamientos ecológicos puedo utilizar?

Fungicida de manzanilla

Podemos preparar una infusión de estas flores que ayudará a combatir tanto el Mildiu como el Oidio o la Roya.

Para hacerlo hervimos 1 litro de agua, retiramos del fuego e incorporamos 30gr de flores secas de manzanilla.

Cuando enfríe lo aplicaremos en forma de pulverización en las hojas y el tallo de la planta a primera o última hora de la tarde.

Fungicida de cola de caballo

Esta planta tiene propiedades innumerables, y entre ellas la de combatir los hongos.

Es realmente efectivo gracias un principio activo que contiene, la Equisetonina.

La cola de caballo es bastante frecuente encontrarla por nuestros bosques, y a la hora de recogerla es muy importante que no la cojamos de lugares cerca de la carretera ya que estará muy contaminada.

Si no la encontramos, también la podemos comprar, eso sí, lo ideal es que esté verde, no seca.

Para preparar el caldo necesitaremos un manojo de cola de caballo, un litro de agua y un recipiente con tapa o algo para colocarle encima.

Picamos la cola de caballo, la echamos en el litro de agua y dejamos reposar con la tapa sin que haga clic unas 12 horas.

En este tiempo la cola de caballo soltará sus propiedades al agua. Posteriormente procedemos a calentar la mezcla a fuego lento unos 15 minutos aproximadamente, apartamos del fuego y dejamos reposar.

Para su aplicación verteremos una parte del preparado por cada 3 de agua y es en este momento en el que podemos disolver un trocito de jabón potásico en el caldo para ayudar a combatir el mildiu y a que el preparado se fije mejor a las hojas. Aplicamos en forma de pulverización.

Actúa engrosando ligeramente las paredes de las plantas, les hace más fuertes. Es muy útil como preventivo, aunque la verdad nosotros lo hemos probado como curativo y también funciona bastante bien.

Preparado de Ajo

Es un fuerte bactericida y fungicida, además de funcionar a la perfección como repelente de otras plagas como el pulgón. Dejaremos macerar una cabeza de ajo en un litro de agua durante 24 horas.

Una vez pasado este tiempo estará listo para su aplicación en una proporción de una parte del macerado por tres de agua.

Lo aplicaremos en forma de pulverización. En este caso lo ideal es usarlo como preventivo.

Fungicida a base de leche

Entre las propiedades de la leche tenemos aminoácidos, fosfatos y sales de potasio, responsables del control fungido.

Estas propiedades crean una capa protectora en la corteza de la planta.

También contiene oligoelementos y sales mineralesque hacen de abono foliar y protegen a la planta.

Pero el verdadero responsable de combatir a los hongos es el ácido láctico que contiene la leche.

Para prepararlo mezclaremos agua con leche en una proporción de 4 de agua y uno de leche y le añadiremos también una cucharadita pequeña de bicarbonato (por ejemplo 400 ml de agua, 100 ml de leche y 10 gr de bicarbonato.

Lo aplicaremos en la planta con un difusor por la cara y el envés de las hojas, también en los tallos.

Podemos aplicarlo durante 15 días como paliativo si ya tenemos el hongo instalado, y también lo aplicaremos después de las tormentas o en días de alta carga de humedad.

Estos son algunos de los preventivos que podemos utilizar a la hora de tratar el mildiu, sobre todo de cara a evitar que se manifieste en nuestros cultivos.

Una vez que el milidiu está instalado en nuestras plantas, la cosa se complica porque es una enfermedad muy difícil de tratar.

Un abrazo enorme Cultiva2!!

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